La puesta en marcha de las refacciones del Instituto de Recuperación del Adolescente de Rosario (Irar) es el primer paso para que los adolescentes alojados puedan acceder a un lugar digno de detención, tal cual lo establece la ley.
Jóvenes tras las rejas: el primer paso de un traslado esperado
Este jueves se licita la ejecución de obras en el Instituto de Recuperación del Adolescente de Rosario, que será destinado a penal para mayores. En tanto, se espera la aprobación del Presupuesto 2009 que es la llave para la construcción del nuevo edificio de Justicia Penal Juvenil, pensado para una estadía digna de los internos
Este jueves, el gobierno de la provincia realizará la apertura de sobres para la recuperación del inmueble, ubicado en Cullen y Saavedra, la llave para que en un futuro este lugar se convierta en un penal para adultos. En tanto, se espera –cruzando los dedos– la aprobación del presupuesto provincial 2009 que dará luz verde a la construcción del nuevo edificio de Justicia Penal Juvenil, un espacio concebido para generar un cambio cualitativo en la vida de los jóvenes privados de libertad.
El plan de obras cuenta con un presupuesto oficial de 874.715,95 pesos y se prevé un plazo de ejecución de 180 días, a partir de la firma del contrato. Según se desprende de un informe realizado por personal técnico del Ministerio de Obras Públicas y Vivienda de la provincia, en el inmueble se han constatado filtraciones de agua, obstrucción de desagües pluviales, sistema eléctrico crítico e insuficiente, problemas sanitarios y falta de pintura en general.
En ese sentido, se emprenderá la impermeabilización de las cubiertas de techos, cuya superficie es de casi 2.000 metros cuadrados y se realizará un nuevo tendido de cañerías de agua y contra incendios, eliminando una serie de pilares de soporte en las instalaciones existentes a fin de optimizar el funcionamiento de desagües en las cubiertas de techo.
Asimismo, se emprenderá la renovación total de la instalación eléctrica; se ejecutarán nuevas troncales principales; tablero general; de distribución y seccional; se incrementarán tomas en el sector penales; video cable; bocas para telefonía; climatización de los pabellones e ampliación de luminarias en circulaciones internas y exterior en el predio.
Además, el proyecto prevé la corrección de los desagües pluviales en general, a efectos de facilitar el escurrimiento de las aguas de lluvia, evitando obstáculos que impidan el libre vertido de las mismas.
De acuerdo a lo informado a Rosario3.com por Juan Lewis, subsecretario de Asuntos Penales, “la idea es cerrar el Irar una vez que se terminen las obras y que este lugar se destine a un penal para mayores a cargo del Servicio Penitenciario de la provincia”. En este caso, los adolescentes internos serían llevados a un nuevo espacio: el edificio de Justicia Penal Juvenil.
Sin embargo – advirtió– este cambio trascendental para la política provincial de seguridad y de menores en conflicto con la ley, está atado a la aprobación del Presupuesto Provincial 2009: “Allí está contemplada la construcción del nuevo edificio donde serían llevados los jóvenes que hoy son enviados al Irar”, precisó Lewis.
Una vez que la partida sea aprobada, se procederá a llamar a licitación: “Si se aprueba el presupuesto este año, el año que viene estaríamos licitando las obras”. Aunque no dio mayores precisiones al respecto, el subsecretario señaló que el nuevo edificio podría ser elevado en cualquier punto del sur provincial y manifestó dudas en cuanto a la posibilidad de que sea Rosario la sede.
Entre otras cosas, Lewis indicó que el diseño del lugar es materia de análisis y discusión de profesionales y organizaciones no gubernamentales. “La idea es conformar un lugar con módulos más pequeños que sean habitados por entre 6 y 8 chicos, con más espacios verdes”.
Para dejar atrás
El Irar es un instituto cerrado de rehabilitación para jóvenes menores de 18 años, que depende de la Dirección Provincial de Justicia Penal juvenil. Esta área, que antes se llamaba Dirección del Menor en Conflicto con la Ley Penal, se encuentra bajo la órbita de la Subsecretaría de Asuntos Penales del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia. Actualmente, la Dirección Provincial de Justicia Penal Juvenil desarrolla sus actividades en base a tres tipos de programas: libertad asistida, internación en lugares abiertos e internación en lugares cerrados.
En el instituto funciona una escuela y se llevan adelante programas con el propósito de rehabilitar a los jóvenes, con talleres de huerta, carpintería, radio y murga, entre otros. Sin embargo, este lugar ha sido objeto de numerosas críticas debido a su estado de abandono y por las denuncias de los mismos pibes internados que han sido objeto de abandono.
Este año la Coordinadora de Trabajo Carcelario (CTC) alzó la voz contra la suciedad en el lugar. Señaló que los chicos comían menos, que debían respirar la humedad imperante y soportar la falta de ventilación. Ratas, cloacas tapadas, limitación de espacio y falta de actividades culturales y recreativas completan una lista que se viene repitiendo a travás de los años y que incluso despertaron la reacción de la misma Corte Suprema de Justicia de Santa Fe. El alto tribunal emitió en mayo del año pasado, en el que encomienda al gobierno provincial que a la mayor brevedad posible refaccione y repare el Irar.