El bullying, burla, maltrato, acoso, ataques físicos y psíquicos, marginaciones y discriminaciones, en ámbitos familiares e instituciones educativas, dan cuentan de una involución en los patrones de conductas adquiridas socialmente. No podemos continuar negando sus patológicas consecuencias: abandono de la escolaridad, intentos de suicidios y hasta tragedias como las de Carmen de Patagones o el caso de Javier Romero “Pantriste” y otros que mostraban los medios de EE.UU. y sentíamos tan lejanos. Herbert George Wells decía: “LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD, ES CADA VEZ MAS UNA CARRERA ENTRE LA EDUCACION Y LA CATASTROFE”.