Según una nota que publica este martes el diario porteño La Nación, unos 200 dirigentes políticos y gremiales, docentes y comerciantes de La Pampa participaron de una asamblea y dieron su respaldo al proyecto para denunciar a la provincia vecina por el costo que paga desde hace medio siglo el ecosistema del oeste pampeano a raíz del represado y desvío del curso del río en territorio mendocino, especialmente a partir del dique El Nihuil.
La asamblea ciudadana "Los pampeanos reclamamos por el río Atuel" fue convocada por la Fundación Chadileuvú (Fuchad), la Asociación Ambientalista Alihuén y la Cooperativa Popular de Electricidad de Santa Rosa (CPE), quienes decidieron en ese plenario hacer la denuncia ante la CSJN.
En la asamblea se renovó el rechazo a las retenciones de agua que se efectúan desde la década del 40 en Mendoza, que han provocado el éxodo de cientos de pobladores ribereños y la desertificación del oeste pampeano. Los asambleístas también cuestionaron las liberaciones esporádicas de agua río arriba (desde los diques), a las que atribuyen inundaciones en la zona.
"En la tierra pampeana que bañaba el Atuel hace un siglo había alfalfales. Hoy hay médanos. Había miles de ovejas y chivas, y hasta colonias agrícolas. Hoy sólo quedan pocas chivas, vacas y un puñado de ovejas. Había centeno y maíz, y en los bañados se refugiaban los carpinchos. Hoy no hay nada. Sólo viento, medanales y suelos salinos. Y cada tanto se cubre todo de agua", cuenta en la nota de La Nación el periodista Sergio Romano.