La ilusión de toda la provincia de que la selección nacional pise suelo rosarino podría hacerse realidad este martes, en la reunión del Comité Ejecutivo de la Asociación del Fútbol Argentino. Pero podría no ocurrir el 5 de septiembre con Argentina-Brasil; en cambio, el Gigante podría albergar el choque con Perú, el sábado 10 de octubre y por la anteúltima jornada de Eliminatorias.

Según trascendidos, la entidad que preside Julio Grondona decidiría no mudar el clásico sudamericano por motivos económicos, ya que la capacidad del estadio canalla es mucho más reducida que la cancha de River.

Entre las entradas de protocolo, las que reciben los jugadores y dirigentes más la prensa, solo quedaría lugar para vender en Rosario 15 mil localidades, casi la mitad de lo que habitualmente se expende en Buenos Aires. Igual, en sus últimas declaraciones públicas Grondona dijo que lo deportivo será más considerado que el factor económico. De todas maneras, habrá que esperar.