A propósito de un estudio realizado en Estados Unidos sobre la incidencia que el consumo de los medios tiene en jóvenes de entre 8 y 18 años, el Gerente de Radio Nederland Training Centre, América Latina, Carlos Eduardo Cortés, aportó algunas reflexiones, a partir de que “en el hogar, la escuela y el trabajo, las tecnologías de información y comunicación, conocidas como TIC, se combinan, fusionan y vuelven omnipresentes en nuestro entorno cotidiano”.
La generación mediática crece sin mayores controles en su entorno cotidiano
La mayoría de los niños y adolescentes dicen que sus padres no han establecido normas de consumo de medios ni verifican el resultado de sus propias elecciones en televisión o Internet
Cortés rescata del estudio, Generación M: los medios en la vida de las personas entre ocho y 18 años, elaborado en 2005 por la Kaiser Family Foundation, que “la llamada ‘generación mediática’ consume medios de comunicación casi 6,5 horas diarias, lo cual deja claro que el potencial impacto de dicho consumo en casi todos los aspectos de las vidas de niñas, niños y jóvenes no puede ser desconsiderado”.
Sobre la responsabilidad de los adultos, señala: “El consumo simultáneo y la tendencia juvenil a la multitarea (estudiar, ver televisión, escuchar música y comunicarse en red con los amigos, todo al mismo tiempo, por ejemplo) aumenta con la presencia de medios en los espacios cotidianos.
La proporción de niñas, niños y adolescentes que dicen que sus progenitores no han establecido normas de consumo de medios y la poca frecuencia con que estas personas adultas verifican el resultado de sus propias advertencias –cuando las hacen– indican que la gran mayoría no siente que sus hijas e hijos pasan demasiado tiempo con los medios, o simplemente han renunciado a hacerlo”.
En fin, concluye que “el mundo mediatizado sólo tiende a aumentar, pero eso mismo justifica prestar mucha más atención, entender cómo y por qué se da este consumo, y no mantenerse al margen de un cambio que llegó para quedarse”.
Fuente: Página12