Sin entrar en generalizaciones absurdas, los paraguayos suelen ser tipos muy nobles, que no caen en el vicio de los discursos solapados o las declaraciones acomodaticias, tan frecuentes en el mundillo del fútbol. En consonancia con esta sensación, Alejandro Da Silva aceptó dialogar con la prensa este duro lunes post derrota con Huracán y entregó su cruda visión del presente rojinegro.