Quien reveló que María Cardozo había sido amenazada, la semana pasada, fue la jueza federal rosarina Laura Inés Cosidoy, la misma que realizó recurrentes denuncias de connivencia entre el narcotráfico y la conducción de Drogas Peligrosas que derivaron en el reciente descabezamiento de ésta repartición.
Cosidoy trabajó en estrecha colaboración con el comisario De Félix, otro que denunció e investigó la corrupción en la fuerza.
De Félix falleció años atrás en un choque. La Justicia cerró la causa al considerarlo un accidente, pero la familia del comisario cree que pudo ser un atentado y por eso siguió, por su cuenta, con una investigación.
“A lo mejor eso está molestando”, le dijo Cardozo al periodista Luis Novaresio, de Radio 2, al contar cómo fueron las amenazas que recibió la semana pasada.
La intimidación le llegó a través del esposo de la señora que trabaja en su casa, a quien dos hombres que se bajaron de un auto mientras circulaba en bicicleta por Reconquista le dieron un sobre para que le entregara “a la señora”. “Y no hagan denuncias que van a ser todos boleta”, le advirtieron.
El sobre oficio tenía un papel adentro y en letra imprenta mayúscula, recortada de una revista, la leyenda: “Negra, esto recién empieza”.
De acuerdo a lo que pudo detallar el marido de su empleada, uno de los hombres que lo abordó tenía una tonada de santafesino y "el que más le pegaba con el arma por las costillas tenía nuestra tonada, y supongo que sería un entregador. Mientras, el que estaba en el auto hablaba por teléfono y decía: «El trabajo estaba hecho, pasamos por San Justo a cobrar»”, con lo cual se supone que fue por encargo. Cardozo hizo la denuncia y pasó estos datos a la policía.