Sin estridencias. Así fue el último adiós a Luis Alberto Spinetta, en una ceremonia íntima en una sala velatoria de Buenos Aires primero y en el cementerio de Pilar después, donde el cuerpo del músico fue cremado. Las cenizas del Flaco, según anunció su hijo Dante, serán arrojadas al Río de La Plata.

"Próximamente le vamos a decir a la gente dónde vamos a esparcir sus cenizas para que también pueda despedirse... Seguramente va a ser en el Río de la Plata donde también está su padre y ahí van a poder ir a tirar una flor y ver un atardecer con él", dijo Dante después del velorio y cremación del Flaco.

La decisión de la familia fue que la despedida quedara reservada para familiares y amigos. Lo más lejos posible de los medios.

Los fans se concentraron en gran número frente a la sala velatoria y hubo aplausos luego, al mediodía, mientras el cortejo iba hacia el cementerio del barrio de Belgrano a Pilar, al mediodía.

Cuando el coche fúnebre llegó al cementerio, al que el acceso fue bien restringido, se escucharon gritos emocionados de gente que se quedó afuera. "Gracias, Flaco", Grande, Flaco", "Buen viaje, flaco", fueron algunos.

Dante, uno de los cuatro hijos del recordado artista, fue quien pidió a la prensa que no se viera el cuerpo de su padre. En la puerta de la casa del músico, en Villa Urquiza, eran muchos los fanáticos que se reunieron para dejar mensajes o flores.

Entre otros famosos, en el velatorio estuvieron presentes Ricardo Mollo, Charly García, Juanse, Fito Páez, León Gieco, Guillermo Vilas y los integrantes del grupo Babasónicos, por mencinoar algunos.

El Flaco, uno de los mayores referentes históricos del rock nacional, falleció este miércoles a los 62 años, luego de luchar contra un cáncer de pulmón que le habían diagnosticado el año pasado.

Cantante, guitarrista, poeta y compositor, el Flaco es considerado uno de los padres del rock argentino y dejó innumerables obras que son himnos de la música local, como "Muchacha ojos de papel" o "Todas las hojas son del viento". Lideró bandas como Almendra, Pescado Rabioso, Invisible, Spinetta Jade y Los Socios del Desierto, y también tuvo una prolífica carrera como solista.

Spinetta había hecho pública su enfermedad el 23 de diciembre último, en medio de confusas versiones en torno a su salud. Fue a través de una emotiva carta, difundida por la red de internet Twitter por Dante, uno de sus hijos, también músico.

Tras varios meses de lucha, el deceso del trascendental músico argentino se produjo en su hogar, donde se encontraba luego de pasar 25 días internado en el Cemic, confirmaron sus familiares.

"Así mi corazón te añorará. Te amo papá", escribió su hija Vera Spinetta en Twitter, donde rápidamente se multiplicaron los mensajes en homenaje al músico. Catarina, en tanto, expresó: "No habrá un destino incierto, ni habrá distancia que pueda alejarme de ti... Amor eterno a mi Padre!".

El artista había sido dado de alta el pasado 30 de enero de ese centro médico de Buenos Aires luego de una operación de divertículos, aunque habían aclarado que dicha intervención no tenía relación directa con el cáncer.

El Flaco supo colmar de una elevada concepción estética a cada uno de los pasos que dio desde su nacimiento, el 23 de enero de 1950 en el barrio porteño de Belgrano.

Al filo de la Nochebuena de ese año y ante la carroña mediática acerca de su estado, utilizó la cuenta de Twitter de su hijo Dante para expresar: “Desde el mes de julio sé que tengo cáncer de pulmón. Estoy muy cuidado por una familia amorosa, por los amigos del alma, y por los mejores médicos que tenemos en el país. Ante el aluvión de información inexacta, quiero aclarar públicamente las condiciones de mi estado de salud. Me encuentro muy bien, en pleno tratamiento hacia una curación definitiva”.