Los veterinarios del zoológico de Leipzig, en Alemania, se enfrentan a un extraño fenómeno que afecta a los osos de anteojos que habitan en el recinto. Las dos hembras de esta especie, llamadas "Dolores" y "Lolita", normalmente parecidas a un suave peluche, han perdido casi todo su pelo repentinamente. Se han quedado calvas en todo el cuerpo.