El temporal de agua que azota a la región volvió intransitables varios caminos y rutas de la provincia que, en algunos casos llegó a dejar aislados algunos pueblos. Por las intensas lluvias quedaron complicada la circulación en las rutas 34, 33 y en la autopista a Santa Fe. También en el ingreso a Rosario por Ovidio Lagos, en la ruta 18, donde el tránsito quedó cortado este jueves por la mañana.
Afortunadamente, cerca de las 14 se abrió el tránsito en la ruta 9 ya que se habilitó el puente que cruza el río Carcaraná entre las localidades de Carcarañá y Correa. La decisión se tomó luego de realizar pruebas técnicas que aseguraran el paso seguro de vehículos: allí se determinó que no había desprendimientos ni fallas. En una primera etapa se permitieron sólo vehículos livianos, pero luego de gran porte. Lo mismo ocurrió este jueves a la tarde en el puente sobre la ruta 33.
En la autopista 34 a la altura del kilómetro 5, en Totoras, además de haber anegamientos por la lluvia se registró un choque entre dos camiones. Aunque no hubo heridos tras el impacto, el tránsito estaba desviado. En esa zona ya se contabilizan 40 centímetros de agua sobre la cinta asfáltica y los conductores que se dirigen para el lado de Córdoba deben desviarse del camino para tomar la ruta 21.
Pero además, en esa ruta no se podía ingresar desde calle Baigorria, en Rosario, y también había un corte a la altura de la A-012.
La autopista a Santa Fe, donde varios barrios estaban inundados, estaba transitable, aunque la recomendación era circular con suma precaución.
Aislados
"Son cerca de 30 las localidades complicadas en la provincia, fundamentalmente en la zona sur y centro", confirmó José Bernhardt, subsecretario de emergencia de la provincia, en diálogo con Radio 2.
Otra situación crítica se vivía en el pueblo de La Vanguardia, departamento Constitución, ubicado a 50 kilómetros de Rosario, rodeado de arroyos (Cabral y Pavón). "Con estas lluvias se han desbordado dejando al pueblo aislado completamente", contó una lectora, Teresita Solá, en un email enviado a Rosario3.com. Ella explicó que existen cuatro salidas del pueblo, que una es de barro (hacia Santa Teresa), otras dos implican cruzar el arroyo Pavón (para ir a Uranga y Cepeda), y la cuarta es un puente que une la localidad con Coronel Bogado. Esta última "era siempre la única salida, pero ahora también el arroyo Pavón ha cruzado por encima del camino y tampoco se puede llegar ni salir, son 400 habitantes a la suerte de Dios", relató.
También desde Rafaela se comunicó que la situación era complicada. "La situación aquí esta caótica como nunca se vio, no hay clases ni hoy ni mañana; hay barrios donde el agua tapa todo el diámetro de los neumáticos. En algunas casas hay un metro de agua y dificultades en los ingresos", comentó desde esa localidad Enrique Finger Hute. Algo parecido ocurría en toda la zona.