Y no para de llover. Toda la noche cayó agua y las precipitaciones continuaron este miércoles a la mañana, cuando también se renovó el alerta meteorológico para la región. Así, la situación –absolutamente inédita– seguía complicándose en toda la ciudad, cada vez más parecida a Venecia, y más personas tenían que abandonar sus casas inundadas, fundamentalmente en las zonas norte y oeste.