De acuerdo con la Sociedad Argentina de Nefrología (SAN), en la Argentina cada año aumentan los casos de enfermedad renal. Puntualmente, se registra un incremento del 6 por ciento.

El principal inconveniente es que muchas veces la enfermedad no se advierte hasta que evolucionó, principalmente porque las patologías renales suelen ser silenciosas y aparecer en cualquier momento.

Así, se estima que en nuestro país el total de personas con enfermedad renal que desconoce su situación asciende a 3 millones. Esto es particularmente peligroso para quienes presentan además otras patologías como por ejemplo la hipertensión y la diabetes, que deben ser muy controladas.

Los riñones, que son dos, se encuentran en la parte posterior del abdomen, en la mitad de la espalda. Integran el sistema urinario y tienen la función de eliminar los desechos del cuerpo, regular el equilibrio electrolítico (entre el sodio y el cloro) y estimular la producción de glóbulos rojos.

"Las enfermedades de los riñones pueden ser silenciosas y aparecen a cualquier edad. En la Argentina existen 26 mil pacientes en diálisis y cerca de 1 millón con diagnóstico de Enfermedad Renal Crónica (ERC). Además se estima que hay otros 3 millones de personas que padecen alguna disfunción en los riñones y que desconocen esa condición", sostuvo la doctora Cristina Vallvé, médica Nefróloga, presidente de la Sociedad Argentina de Nefrología (SAN).

"El panorama se torna más complejo cuando se considera que los casos crecen a una tasa anual de 6 por ciento, y que el aumento de afecciones vinculadas como la hipertensión y la diabetes provocará una tasa aún mayor de enfermos", agregó la especialista.

"Los riñones, que tienen el tamaño de un puño y contienen en su interior alrededor de 1 millón de pequeñas estructuras llamadas nefronas encargadas de filtrar la sangre y eliminar el exceso de agua y las toxinas mediante la orina, son cruciales para la supervivencia humana por lo que un deterioro en su funcionamiento impacta seriamente en la salud", estableció la presidenta de la SAN.

Cabe destacar que los riñones intervienen, además, en la producción de hormonas que regulan la presión arterial, la producción de glóbulos rojos y de vitaminas.

"Cuando no pueden cumplir con estas funciones, el agua y las toxinas se acumulan en la sangre, generando síntomas como dolor lumbar y cólico renal, hinchazón de ojos, manos y pies, y complicaciones al momento de orinar. Éstas suelen presentarse como mayor frecuencia a la noche, al igual que el dolor o ardor en la micción, y la aparición de espuma o cambios en el color de la orina", puntualizó Vallvé.

En los niños, un síntoma frecuente de enfermedad renal es el retardo en el crecimiento.

Fuente: Pro Salud News