El dueño del local ubicado frente a la plaza San Martín que fue robado esta madrugada reclamó que el gobierno intervenga en el campamento que mantiene la Corriente Clasista Combativa en ese espacio céntrico, ubicado frente a la sede local de la Gobernación. "Todos los comerciantes estamos alerta por la situación de la plaza", admitió Gabriel, en diálogo con Radio 2.
"Los comerciantes estamos alerta por lo que pasa en la plaza"
El dueño de un comercio ubicado en Dorrego 810, robado esta madrugada por un grupo de chicos que luego se escondió en el campamento frente a la Gobernación, aseguró que hubo otros intentos de asalto. "Estamos desprotegidos", se quejó. Y reclamó respuesta de las autoridades
"No hemos tenido robos antes, pero sí intentos de entrar en el negocio cuando estábamos cerrando. Trataron de forzar la puerta. Hay un ambiente pesado en el barrio", aseguró Gabriel. "Hay alguien que no toma las decisiones que tiene que tomar. Esta gente tendrá derecho a protestar, pero alguien tendría que tomar una decisión. Pero como es un año electoral tienen miedo de tomar decisiones. Les importan ellos y no nosotros, que vivimos desprotegidos y también votamos", planteó.
Este viernes, cerca de la una treinta de la madrugada, unos quince chicos rompieron la vidriera de un local comercial ubicado en Dorrego 810 y se llevaron prendas de vestir. La versión policial, que es apoyada por el dueño del comercio, tras el robo los menores escaparon y se escondieron en la plaza San Martín, donde la CCC mantiene desde hace diez días un campamento en reclamo por ayuda social.
"Me despertaron los que monitorean la alarma a la 1.30 para decirme que habían roto el vidrio. Mientras venía llegó el patrullero que estaba a una cuadra en la plaza. Y cuando vieron venir a la policía salieron corriendo. Me dijeron que eran como quince pibes, todos menores", comentó Gabriel. "Algo de ropa tiraron por el camino, pero se ve que eran muchos porque vaciaron dos percheros enteros", detalló.
"Huyeron y se quedaron en la plaza, se diluyeron en el montón de gente. Creo que detuvieron cuatro o cinco menores, los llevaron comisaria. Pero deben haber salido enseguida porque habían tirado todo, no tenian nada encima", concluyó. Además del vidrio destrozado y la ropa que se llevaron, Gabriel aclaró que también "destruyeron manequíes, probablemente en el afán de sacarles la ropa rápido".