Científicos de la Universidad del País Vasco, en España, evaluaron los tres aspectos subjetivos de la soledad: la soledad social, la familiar y la de pareja, y en los tres ámbitos llegaron a la conclusión que ellos “se sienten más solos”.
Un estudio sobre 517 personas, entre los que preponderaban los recientes divorciados, confirmó que "los hombres muestran niveles significativamente más altos de soledad en todas las escalas”, según publica el diario Clarín.
"Los hombres se deprimen más que las mujeres. Deben enfrentar el duelo por la mudanza, por el nuevo hogar, dejar de vivir con sus hijos y pasar a ser padre de visitas”, sostuvo Viviana Koffman, abogada especialista en derecho de familia.
“Al principio el hombre abandona su aspecto, baja su rendimiento laboral y se aleja de sus hijos porque no quiere que lo vean en ese estado. La separación implica la pérdida de la pareja, de una vida sexual garantizada y de cierta alianza económica que favorece la prosperidad", continuó Koffman.
Como contrapartida, Daniel Rubin, abogado de familia, asesor de Anupa (Asociación Nuevos Padres) afirmó que “el hombre tiene más tiempo para formar nuevos vínculos . La mujer, por el contrario, muchas veces se abroquela en la vida familiar con sus hijos, tiene menos tiempo libre, y relega los nuevos vínculos”.