En una sesión extraordinaria y maratónica el Concejo tiene previsto mañana aprobar un paquete de medidas de seguridad para los taxis de la ciudad. Se trata de una nueva ordenanza que todavía es un anteproyecto que incluye: plazos de adhesión obligatoria a un sistema de monitoreo y transmisión de datos (GPS y GPRS), cámaras de seguridad con micrófono activado por el llamado botón de pánico, una tarifa diferencial de 40 centavos extra para viajes nocturnos por radiollamado y, aunque todavía sigue en debate, alguna barrera de separación entre pasajero y chofer.