Al entrenador de Rosario Central, Leonardo Madelón, parece que se le acabó la paciencia. Y no porque se demore la concreción de refuerzos para su plantel. En realidad, lo que este martes fastidió el habitual buen ánimo del entrenador canalla fue el par de preguntas que, con insistencia, le formularon algunos cronistas sobre la dificultad de conseguir caras nuevas que ha tenido el club.
La charla que en horas del mediodía el DT venía manteniendo con los periodistas que se encuentran cubriendo la pretemporada auriazul transitaba por carriles normales, hasta que uno de los enviados de una radio AM de la ciudad quiso saber si creía conveniente que los refuerzos llegaran con la etapa de preparación tan avanzada. Allí, el primer gesto de fastidio y la respuesta a regañadientes de Madelón.
“No me digas cuándo es conveniente que llegue algún refuerzo. Yo tengo todo muy claro en Rosario Central, más claro de lo que ustedes creen. Yo voy a definir quién y cuando debe venir, y si creo que no necesito a nadie más, no vendrá nadie más”, soltó el oriundo de Cafferatta ante la consulta, visiblemente ofuscado por la sugerencia sobre la inconveniencia de la llegada tardía de alguna nueva incorporación.
Y si bien luego la conversación giró en torno a otros temas, ni bien los cronistas volvieron a posar sus inquietudes sobre aquel punto de la discordia, se desató el vendaval que cortó la conferencia: “¿Y la gente de Central cómo entiende que vos te vayas a tomar tu tiempo para la llegada de otro refuerzo?" quiso saber un enviado de una FM. Ya iracundo, Madelón tronó: “La gente de Central está muy bien, la gente de Central entiende… ustedes son los que tienen que entender. Yo estoy buscando lo mejor para Central, la gente de Central sabe que cambió… escúchenme… chau… la seguimos después”. Telón para el primer pequeño escándalo del verano.
Your browser doesn’t support HTML5 audio