Síntesis Ejecutiva
- Dentro de los ingresos corrientes que perciben las provincias, los de índole tributaria representan, en promedio, el 81% del total.
- Sobre el total de ingresos corrientes de cada provincia, los tributos de origen provincial representan, en promedio, tan sólo el 20%. Formosa es la que evidencia el más bajo indicador, con un nivel de 4.9%. Es decir, esta provincia financia casi la totalidad de sus gastos con recursos provenientes de la Nación.
- Además de Formosa, hay seis distritos donde la recaudación provincial representa menos del 10% de los ingresos corrientes. En este grupo de provincias se encuentran La Rioja (5.7%), Catamarca (7.8%), Santiago del Estero (9%), Jujuy (9.1%), Chaco (9.8%) y Corrientes (10.2%).
- En otro orden, las provincias que exhiben una mayor participación son, además de Ciudad de Buenos Aires, Buenos Aires (47.5%), Santa Fe (30.2%), Córdoba (28.3%) y Mendoza (26.4%).
- Una mayor participación de los recursos tributarios nacionales sobre los ingresos corrientes totales de una provincia, demuestra claramente una menor autonomía fiscal de la misma. Esta mayor dependencia hacia los fondos que envía el gobierno nacional, no estimula el uso eficiente de los recursos públicos y, por lo tanto, genera condiciones para incrementar erogaciones de distinta índole sin que esto represente una mayor carga para el contribuyente local.
- A partir de esto, se desprende la necesidad de que los estados provinciales recuperen su autonomía fiscal y puedan definir sus funciones elementales en materia de impuestos y gastos, para lograr de este modo, una mayor eficiencia en la administración de sus recursos cumpliendo a su vez con el principio de correspondencia fiscal.
Composición de los Ingresos Corrientes de las Provincias
Dentro de los ingresos corrientes que perciben las provincias, se encuentran los de índole tributaria y los que no lo son. En promedio, los primeros representan el 81% de los recursos que entran a las arcas públicas de las diferentes jurisdicciones. Sólo en aquellas provincias donde existen ingresos por concepto de regalías, los ingresos de carácter tributario tienen una participación inferior a la observada en el resto de los distritos, tal como sucede en Chubut, Neuquén y Santa Cruz.
Puntualmente, con respecto a los recursos tributarios, la provincia donde se exhibe una mayor participación de los mismos sobre la totalidad de ingresos corrientes, es en Formosa con el 94.5%, mientras que en el otro extremo se encuentra Neuquén con el 40.7%.
Marcada dependencia de las provincias hacia los recursos que envía el Gobierno Nacional.
Informe de Lic Agustina Leonardi, de la Fundación Libertad, en el cual se analiza la participación de los ingresos de recaudación provincial en el total de ingresos corrientes de las provincias. A partir de esto, se desprende que hay distritos donde dicha participación no alcanza el 10%, tales como los casos de Formosa, Catamarca y La Rioja.
Provincia
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Ingresos Tributarios / Ingresos Corrientes
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Ciudad de Bs. As
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87,5%
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Buenos Aires
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87,3%
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Catamarca
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87,8%
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Córdoba
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84,6%
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Corrientes
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92,1%
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Chaco
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91,7%
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Chubut
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49,7%
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Entre Ríos
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85,8%
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Formosa
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94,5%
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Jujuy
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86,0%
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La Pampa
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80,1%
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La Rioja
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70,8%
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Mendoza
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75,8%
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Misiones
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86,5%
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Neuquén
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40,7%
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Río Negro
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78,7%
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Salta
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93,5%
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San Juan
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93,9%
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San Luis
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90,9%
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Santa Cruz
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46,9%
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Santa Fe
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87,0%
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Sgo. Del Estero
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88,0%
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Tucumán
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93,5%
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Tierra del Fuego
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68,3%
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Promedio
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80,9%
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Ingresos Tributarios de Origen Nacional y Provincial
Por su parte, los ingresos tributarios comprenden aquellos que corresponden a la órbita de la recaudación provincial y los que son provenientes de la Nación. Entre los impuestos que recaudan las jurisdicciones, se destaca el impuesto a los ingresos brutos que representa en promedio el 60% de la recaudación para cada distrito de este nivel.
Sobre el total de ingresos corrientes que ingresa a cada provincia, los tributos de origen provincial representan en promedio tan sólo el 20% de los mismos, siendo la provincia de Formosa la que evidencia el más bajo indicador, con un nivel de apenas 4.9%. Es decir, esta provincia financia casi la totalidad de sus gastos con recursos provenientes de la Nación.
Además de Formosa, hay seis distritos donde la recaudación provincial representa menos del 10% de los ingresos corrientes. En este grupo de provincias se encuentran La Rioja (5.7%), Catamarca (7.8%), Santiago del Estero (9%), Jujuy (9.1%), Chaco (9.8%) y Corrientes (10.2%).
Por otra parte, 8 provincias ostentan una participación de los ingresos tributarios provinciales sobre el total de recursos corrientes entre el 10% y 20%. Ellas son: Chubut (14.6%), La Pampa (15.4%), Misiones (15.8%), Neuquen (17.6%), Salta (19.1%), San Juan (13.4%), Santa Cruz (12.9%) y Tierra del Fuego (17.9%).
En otro orden, las provincias que exhiben una mayor participación son, además de Ciudad de Buenos Aires, Buenos Aires (47.5%), Córdoba (28.3%), Mendoza (26.4%) y Santa Fe (30.2%) pero aun con porcentajes muy bajos, lo que evidencia también en este conjunto de provincias la pérdida de autonomía fiscal.
En contraste con lo expresado anteriormente, se puede ver que en la provincia de Formosa los recursos que provienen de la Nación son casi el 90% de los ingresos corrientes, en Corrientes y Chaco el 82%, en San Juan el 81% y en Catamarca el 80%.
Qué significa una menor Autonomía Fiscal
Una mayor participación de los recursos tributarios nacionales sobre los ingresos corrientes totales de una provincia, demuestra claramente una menor autonomía de la misma para financiar sus gastos. Esta mayor dependencia hacia los fondos que envía el gobierno nacional, no estimula el uso eficiente de los recursos públicos y, por lo tanto, genera condiciones para incrementar erogaciones de distinta índole en las jurisdicciones sin que esto represente una mayor carga para el contribuyente local.
A su vez, la dependencia económica hacia la Nación conlleva a que los diferentes gobiernos federales, mantengan subordinadas sus decisiones a las voluntades del poder central, sin generar oposición hacia éste, ya que esto repercutiría en las finanzas públicas regionales.
Esta estructura de financiamiento, con una elevada proporción de recursos nacionales, también premia el “lobby” que llevan a cabo los funcionarios públicos (ya que a través de este mecanismo, obtienen fondos para sus respectivas economías regionales) y obliga a la Nación a ser el último responsable de las necesidades financieras de las jurisdicciones con la consecuente absorción de las deudas de éstas.
A partir de esto, se desprende la necesidad de que los estados provinciales recuperen su autonomía y puedan definir sus funciones elementales en materia de impuestos y gastos, para lograr una mayor eficiencia en el gasto público, reducir su endeudamiento y cumplir con el principio de correspondencia fiscal.
Informe de