Entre 1996 y 2007 se evitaron 2.600 muertes y los índices actuales ubican a la Argentina en línea con los países más maduros en el tema.
La reducción del índice de fallecidos en el citado período, incluyendo los accidentes "in itinere" (el trayecto entre la casa y el trabajo), fue de 233 a 144 por cada millón de trabajadores, lo que implica una reducción del 38,1%.
En tanto, cuando se analizan los fallecimientos excluyendo los "in itinere" la disminución llega a 44,2%.
De este modo, la Argentina registra índices de siniestralidad similares a los de sistemas mucho más maduros -como los de Chile y España- si se compara la incidencia de accidentes y enfermedades profesionales ocurridas en ocasión del trabajo, es decir excluyendo los "in itinere".
Por otra parte, el informe destaca que los accidentes y enfermedades laborales en el agro disminuyeron 31%, sector de por sí de riesgo considerable; en servicios financieros, 29%; en electricidad, 26%; y en la industria, 21%.
En cuanto a fallecidos en el ámbito laboral, la reducción más importante se dio en la última década en minería con una reducción del 73%; seguido de un 56% en la industria; 53% en comercio; y 51% en servicios financieros.
Fuente: Télam