La reprimenda surgió de la Oficina de Desarrollo de la Etica de la Capital, y pone como ejemplos a dos conocidas modelos chinas, Gan Lulu y Li Yingzhi, que llevaban en la muestra vestidos con amplios escotes.
Ello ha originado que imágenes de ambas modelos circulen por las redes sociales chinas con mucha más rapidez que las de los automóviles que se mostraban en la exhibición.
Los internautas han usado las imágenes para reirse del Salón del Auto de Pekín, un evento bianual que cada vez tiene mayor importancia en el mercado mundial del motor pero que para muchos comentaristas chinos en la red se está convirtiendo en "una muestra de pechos, más que de coches".
Según el ayuntamiento, todo ello es "publicidad vulgar" y los expositores del salón deben esforzarse porque las burlas en la red no se repitan.