Primero, un camión que llevaba gasoil tomó por Uriarte y Miller (barrio Parque Casas) y ante una maniobra desafortunada en una calzada estrecha, volcó. El problema se extendió más allá de la sola caída del transporte, ya que éste rompió parte del pavimento y la zanja.
Según estimó la policía, la cisterna y su acoplado cargaban 34.000 litros de combustible.
Casi en el mismo lugar, una grúa de gran porte retiró horas antes otro transporte que había quedado cruzado y sin poder salir.
Por otro lado, también este miércoles, un semirremolque Scania de origen brasileño y cargado de hierro desobedeció el operativo de tránsito e intentó esquivar el piquete pasando por el costado, sobre la zona de césped, y quedó varado en el lugar por el hundimiento del suelo.
Personal municipal, trabajaba para desatascar las ruedas traseras del vehículo en el gran pozo que generó a causa de las 25 toneladas de material que portaba.
Los vecinos están que trinan
La gente que habita en la zona de Uriarte y Miller sumó, con los camiones que se accidentaron el lugar, más inconvenientes a los ya generados por las obras de repavimentación y sus respectivos desvíos y problemas, además de la falta de energía eléctrica en el barrio.
No tenemos luz, hay cables de alta tensión cortados que hacen chispazos, ahora se rompió un caño de agua, y están desoyendo todo”, denunció una vecina ante el móvil de Gustavo Poles por Radio 2.