"Si se iba a atacar de forma inminente con explosivos, ¿dónde están estas bombas?, ¿porqué no aparecen?", continuó Allan, para quien las acusaciones del gobierno, se asemejan a las que realizó el premier Tony Blair en 2002, acerca de la existencia de armas de destrucción masiva en poder de Irak, que nunca fueron halladas.