Felipe Cruzat de 11 años estaba internado en el Hospital Clínico de la Universidad Católica y ya había cumplido 93 días esperando un donante de corazón. Pese a que hace 2 semanas fue conectado a un corazón artificial, su condición no mejoró. El deceso del menor, que padecía una miocardiopatía dilatada, fue este viernes según confirmaron fuentes del nosocomio.

El menor recibió el 20 de marzo pasado un corazón artificial que se trajo de Argentina, en una intervención inédita en Chile que contó con la participación de médicos de ambos países. Sin embargo, la recuperación del niño estaba siendo más lenta de lo que se esperaba, publica Terra de Chile.

El implante artificial sólo permitía prolongar la espera y no reemplazaba la urgencia de un corazón.