En diálogo con A Diario, el programa que conduce Alberto Lotuf por Radio 2, Hernán sostuvo que su padre sigue preso “por intereses político electorales”.
Tras las rejas desde el año pasado, acusado de proteger a narcos, entre ellos al también detenido Carlos Ascainí, el reporte de la UIF significa para el ex policía un punto a favor en su causa.
Según publicó El Ciudadano, la investigación se basó en el período en que Tognoli se desempeñó como jefe antidrogas entre 2008 y 2011 y como jefe de la Policía durante diez meses en 2012. Durante ese tiempo, el análisis de datos logró determinar que Tognoli no incrementó su patrimonio. Sus hijos, Hernán y Martín, llevan a su nombre tres vehículos de gama intermedia: un Citroen C4, una moto Kawasaki Ninja y un Peugeot 207. Descartó además, que el jefe policial posea inmuebles en la capital federal y a partir de cifras de la Ansés se corroboró que en los 11 meses entre 2011 y 2012, Tognoli recibió una remuneración total de 220.682 pesos.
“Sabíamos que esto iba a ser así. No poseemos lujos ni gastos excesivos. No hay nada irregular porque sabemos la vida que llevamos –insistió–, ya se había investigado y nunca se encontró nada”.
En el mismo sentido, apuntó que tampoco se logró demostrar ninguna de las acusaciones que penden sobre su padre. E incluso llamó la atención que el propio Ascainí –sospechado de haber sido alertado por Tognoli en varias oportunidades sobre operativos a realizarse– sostuvo que quien le pasaba datos para salir airoso de los allanamientos era la policía de Villa Cañás.