"Este 24 de marzo tiene que ser abordado así, desde entender, saber convencer al otro y si no se convence, paciencia, porque somos más los que nos hemos dado cuenta de lo que nos pasó y no vamos a volver a cometer los mismos errores", dijo.
La presidenta afirmó que "algunos quieren que nos peleemos, pero no les voy dar el gusto. No nos vamos a pelear los argentinos".
"Ser diferentes no significa que uno sea mejor o peor, tampoco creo en todos igualitos. Lo maravilloso es reconocerse en la diferencia", destacó.
También llamó a "hacer el esfuerzo personal para que de cada uno de nosotros aflore lo bueno y lo mejor y tengamos la fuerza suficiente para dejar de lado lo malo y el odio".
"Los que han hecho estas cosas (los represores) han sido hombres que cuando llegaban a sus casas besaban a su mujer y a su hijo, acariciaban a su perro, iban a misa. Lo importante es saber que la condición humana tiene lo mejor y lo peor", sostuvo.