En los seres humanos la lactancia materna es un factor protector contra varios trastornos somáticos. En cuanto a los trastornos psiquiátricos, el destete precoz se relaciona con un mayor riesgo de dependencia del alcohol, mientras que se han producido resultados contradictorios sobre la asociación con la esquizofrenia.
Hasta el momento no hay información sobre la lactancia materna y el trastorno afectivo prospectivo. Un grupo de investigadores alemanes analizaron la relación entre ser alimentado con leche materna (versus alimentados con biberón) con una depresión posterior en la vida de los humanos.
Los investigadores encontraron una correlación entre no ser amamantado y la depresión posterior, pero no consideran demostrada la relación causa-efecto, porque la lactancia está relacionada con otros elementos de la relación madre-hijo.
Fuente: Tendencias 21