Un motín con quema de colchones se originó alrededor de las 11 de esta mañana, en el mismo sector del edificio de Cullen y Saavedra que fue escenario de aquella golpiza, y una ambulancia del Sies debió concurrir al lugar para asistir a los involucrados en la revuelta.
“Los únicos lesionados fueron dos guardias del Servicio Penitenciario que trabajan en el Irar”, dijo Diego Tejedo, médico a cargo de la unidad N° 26 del Sies que asistió al lugar, al periodista de Radio 2 Gustavo Poles. Uno de ellos sufrió "un golpe en el abdomen" y el otro tenía "síntomas de intoxicación con monóxido de carbono" producto de la quema de colchones.
El instituto contaba este lunes a la tarde con una fuerte presencia policial, y un marcado hermetismo por parte de los funcionarios, que eludían el contacto con la prensa.
El edificio, según aseguró la Coordinadora de Trabajo Carcelario en reiteradas ocasiones, tiene severos problemas de infraestructura, con cloacas que desbordan en forma permanente, además de la presencia de roedores y techos con grandes filtraciones que lo vuelven inhabitable.
El Irar –uno de los tres institutos de régimen cerrado para adolescentes que tiene la provincia– fue creado por decreto en 1998 dentro de la órbita de la ex Dirección Provincial del Menor en Conflicto con la Ley Penal, hoy llamada Justicia Penal Juvenil. En la actualidad cuenta con una capacidad para 50 internos (hay 36 alojados), con dos aulas para escolaridad primaria y dependencias recreativas.
En septiembre de 2008, el ministro de Justicia y Derechos Humanos de la provincia, Héctor Superti, anunció que el nuevo Irar comenzaría a construirse en 2009 y señaló esa obra como "prioritaria para el gobierno provincial".