Fernanda Blasco

"Comedia delirante” es la etiqueta que mejor describe Pájaros volando, el film de Néstor Montalbano protagonizado por Diego Capusotto y Luis Luque que acaba de llegar a los cines. Otros podrían catalogarlo como mezcla de "absurdo" y "ciencia ficción". Aunque lo de etiquetar es sólo un juego. Difícil, casi imposible, definir este ambicioso proyecto que apuesta a una historia tan original como bizarra inspirada en los eternos rumores de que los extraterrestres son viejos amigos de los habitantes de las sierras cordobesas.

El protagonista de Pájaros volando es José, un rockero que tuvo alguna vez éxito pero que hoy atiende el teléfono en una remisería y convive con un padre mujeriego. Su primo Miguel, un ex integrante de la banda con la que acarició algo parecido a la fama, lo invita a mudarse con él a un ignoto pueblito de las sierras cordobesas habitado por personajes freaks que creen en ovnis. Algunos, entre ellos Miguel, aseguran haber sido abducidos por seres de otro planeta y buscan que el ex rockero se les una en su delirio.

A la talentosa dupla Capusotto-Luque, que Montalbano ya dirigió en Soy tu aventura, se le suman en roles secundarios Verónica Llinás, Juan Carlos Mesa, Osqui Guzmán y Damián Dreizik, este último además responsable del guión. Un texto que desborda imaginación pero es bastante inestable. En la enloquecida historia que propone el film, divertidos gags y escenas memorables conviven con tediosos diálogos y tramos fácilmente suprimibles.

Quizá la historia hubiese funcionado mejor con un formato más televisivo, de escenas cortas tipo sketchs. Sin embargo, hubiera sido riesgoso vincular el film aún más a la pantalla chica. Con una mano en el corazón: ¿cuántos entrarán al cine esperando ver a Peter Capusotto? Y aunque algún guiño habrá, lejos está José de ser Peter (o Joseph, en todo caso). Injusto, además, comparar ambos productos solo porque coinciden en su protagonista.

Podría argumentarse que la historia es apenas un "detalle" del film. Lo que el público celebra no es necesariamente lo narrativo. Son los múltiples cameos y las imperdibles apariciones especiales de personajes como Antonio Cafiero, Miguel Cantilo y Víctor Hugo Morales, por mencionar algunos ejemplos (no hay que arruinar la sorpresa, ¿no?). Estas perlitas hacen delirar a la platea, que se entretiene más en esas adorables "pavadas" que en la absurda trama. Y son las que harán que algunos lleven este film a la categoría de “película de culto”. Mientras que otros, menos “volados”, puede que se sientan algo perdidos y hasta bostecen.

Para conocer en qué salas y horarios se exhiben esta y otras películas visitá la cartelera de Rosario3.com.