Eduardo Buzzi, presidente de la Federación Agraria, fue el primero en plantear las quejas del sector por las prioridades del gobierno en la convocatoria al diálogo, en el que por ahora no hay lugar para el campo ni para otros sectores productivos.
"A medida que pasan los días se sigue proscribiendo, con actitudes discrecionales, al sector agropecuario", señaló Buzzi, aunque dejó la puerta abierta a la posibilidad de sentarse con el gobierno, que por ahora sólo convocó a los partidos políticos. "Vamos a ver cómo sigue todo en las próximas horas", afirmó el dirigente agropecuario tras la conferencia de prensa de Randazzo.
Para Buzzi "es un disparate" que se fije como prioridad la reforma electoral. "No es la prioridad de la gente", afirmó.
Y volvió a plantear lo que para él sí es prioridad: "Basta de verso, basta de transferir recursos sin resolver la coparticipación".
Más temprano, antes del anuncio de Randazzo, el presidente de la Sociedad Rural, Hugo Luis Biolcati, había advertido: "No hay tiempo para dilaciones".