Los taxistas aprobaron los correderos seguros y los funcionarios festejaron. Pero se les escapó un detalle: los vecinos de los barrios quedaron marginados de la estrategia y ahora amenazan con sabotearlos. "Si no hay taxis para todos, que no haya para nadie", dijo Ariel Pérez, de la Unión de Usuarios y Consumidores que participó de la asamblea que se realizó en Empalme Granero este viernes a la noche.

"Los vecinos realizaremos una gran asamblea el martes a las 19.30 en la vecinal que está ubicada en Juan José Paso al 2500 y no descartamos que decidamos no dejar ingresar los taxis al barrio", señaló Pérez. Así, el corredor de esa zona noroeste quedaría interrempudio "porque rechazamos el concepto de corredor que es discriminatorio", agregó.

Por su parte, Osvaldo Ortolani, titular de la vecinal Empalme Graneros, dijo a Radio 2 que "Empalme y otros 50 barrios sin corredores" quedan desprotegidos, mientras se sobreprotege a un sector porque tiene capacidad de presión.

"Estamos dando seguridad a sólo algunas áreas y entregando el resto de la ciudad, que es tierra liberada, Encima, se avisa dónde están los controles. Así que si vivís a tres cuadras o más del corredor seguro de embromás", enfatizó Ortolani.

El sistema de corredores seguros se acordó entre las autoridades provinciales, municipales y los propios taxistas, luego de la última crisis por la seguidilla de asaltos a los choferes, que derivó en un paro que se inició el sábado y que, en el horario nocturno, se mantuvo hasta el jueves. Mientras, se sigue analizando la posibilidad de instalar algún dispositivo de seguridad dentro de los propios coches.

Taxistas satisfechos

Representantes de distintos sectores de taxistas hicieron una evaluación positiva de cómo funcionó el sistema de corredores seguros en su debut en la madrugada de este viernes, aunque todos coincidieron en que es demasiado prematuro sacar una conclusión y que será clave ver cómo funciona el dispositivo en las noches de este fin de semana, cuando el movimiento es realmente importante y, además, entran más fuerte en escena dos ingredientes que ellos creen fundamental para esta ola de agresiones que padecen: el alcohol y la droga. Justamente para el fin de semana habrá una sobrecarga importante de trabajo para la policía, ya que además de los 150 agentes que se dedican al operativo taxis hay que contar que otros 150 hacen adicionales en los boliches y que, además, el domingo, otros 400 trabajarán en el operativo de seguridad del partido Newell´s-Belgrano. De hecho, la sobreatención al sector taxis generó preocupación en algunas vecinales, como la de Empalme Graneros, que entiende que se utiliza la lógica de la sabana corta: por proteger los llamados corredores seguros se desprotege el interior de los barrios.

Tanto José Tornambé –de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis (Catiltar)–,Mario Cesca –de la Asociación de Taxistas Independientes (ATI)–, como Horacio Boix –Sindicato de Peones– coincidieron en que no se reportó ningún incidente. Los dos primeros, además, estuvieron algunas horas recorriendo para ver cómo funcionaba el operativo y relataron que la presencia policial en los lugares donde se había acordado reforzar la vigilancia era palpable.

“Si hay presencia policial por supuesto que nos sentimos más seguros”, afirmó Tornambé en diálogo con Rosario3.com.

Otros taxistas comentaron que donde más se vio la presencia policial fue en zona sur y que en el centro no se sintió tanto.

Por su parte, Cesca sostuvo que fue muy notorio el refuerzo de la presencia policial y que esto redunda no sólo en mayor seguridad para los taxistas sino también para todos los vecinos.