Muy temprano comenzaba la celebración de San Cayetano, festividad católica que cada 7 de agosto reúne a miles de rosarinos y fieles de localidades vecinas. Cerca de las 7 de la mañana ya había fieles en el templo de calle Buenos Aires al 2100 que esperaban su turno para pedir o agradecer a los pies del santo. También se acomodaban en sus puestos los comerciantes que ofrecen desde alimentos y estampitas hasta estatuillas de todo tipo.