El año pasado vinieron algunas figuras internacionales y este año arranca de manera prometedora, con las inminentes visitas de Bob Dylan y Andrés Calamaro, lo que hace que muchos piensen en la utopía de que Rosario vuelva a ser o se convierta en cita obligada de los artistas que visitan Buenos Aires. Sin embargo, los productores de espectáculos señalan que la ciudad está a años luz de ser plaza viable para espectáculos de la talla de Madonna o los Rolling Stones.