El Congreso argentino debatirá esta semana si a una serie de productos electrónicos, eléctricos e informáticos, se les duplica la alícuota del IVA de 10,5 a 21 por ciento. Este proyecto de ley, que impulsó el Ejecutivo Nacional, recibió el rechazo de las cámaras empresarias del país, quienes amenazaron con aumentar el precio al público de forma considerable.

"De aprobarse el proyecto, este provocaría aumentos en los productos tecnológicos de hasta el 34 por ciento, entonces muchos sectores de la sociedad quedarán excluidos del consumo de bienes como notebooks, celulares y PC", dijo Norberto Capellán, presidente de la Cámara de Informática y Comunicaciones de la República Argentina (Cicomra).

Actualmente ciertos productos, como computadoras, notebooks, celulares, cámaras digitales, proyectores, pantallas planas y GPS, entre otros más, para la legislación nacional impositiva son considerados bienes de capital, y así en vez de tributar por una alícuota de 21 por ciento como los bienes de consumo, lo hacen a la mitad, sólo a 10,5 por ciento.

Además, estos productos de base tecnológica están desgravados en la práctica de los impuestos internos que se aplican para el consumo de los bienes suntuarios.

Con el argumento de que estos productos informáticos, eléctricos, y electrónicos son demandados por las clases sociales de mayor poder adquisitivo, y de que se producirá un ahorro energético, sin descartar la importancia recaudatoria, el proyecto de ley oficial en su texto propone que la producción y la importación de estos bienes tributen, a partir del 1° de julio, IVA con una alícuota de 21 por ciento e impuestos internos por 17 por ciento.

El proyecto ha tenido un dictamen favorable en la Comisión de Presupuesto y Hacienda y es probable que esta semana se trate en la Cámara de Diputados de la Nación.

A esta iniciativa se le suma el decreto N°252/09 que tiene como fin estimular la fabricación de productos eléctricos y electrónicos en Tierra del Fuego a través de una rebaja de 38,53 por ciento en la alícuota general de los impuestos internos (17 por ciento), pero sólo para los bienes de empresas que se acogieron años atrás a los beneficios del régimen de Promoción Industrial (ley N° 19.640) y no para otras nuevas que quieran sumarse.

La crítica de los empresarios es que la mayoría de los países está respondiendo a la crisis con paquetes de estímulo al sector de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) como instrumento para mejorar la competitividad, la productividad y el empleo en sus economías.

A propósito, Turquía ha reducido el IVA de los productos del sector de las TIC; Australia está implementando una medida que pretende la devolución de impuestos por compra e instalación de computadoras; China ha instalado un reembolso de 13% para la compra de electrodomésticos y PC; se han destinado subsidios para financiar la compra de computadoras con banda ancha en Portugal; y en Vietnam se implementó una reducción de impuestos de ventas y eliminación de aranceles a todos los productos relacionados con las TIC.