En “Addiction”, el equipo de Taylor publica que combinó los resultados de pequeños ensayos clínicos que pusieron a prueba los efectos inmediatos del ejercicio en los fumadores, que al azar hicieron actividad física (salir a caminar o andar en bicicleta) o alguna actividad "pasiva" (mirar una película o permanecer sentados). Los participantes dijeron que habían sentido menos deseos de fumar después de hacer actividad física. "Después del ejercicio, tenían un tercio menos de ganas de fumar que el otro grupo", precisó Taylor. Es posible que el ejercicio actúe como una distracción; mejora el estado de ánimo, de modo que se reduce la necesidad de fumar para estar mejor, según explicó Taylor.
Ninguno de los fumadores participaba de un programa de cesación tabáquica con reemplazo de nicotina, como chicles o parches. La terapia de reemplazo reduce los síntomas de la abstinencia y Taylor señaló que el efecto del ejercicio sería menor en los usuarios de alguna terapia para dejar de fumar, como vareniclina (Chantix) y bupropion (Zyban o genéricos). Aun así, el ejercicio es un hábito saludable para todos. Y Taylor comentó que los fumadores suelen engordar cuando dejan de fumar, un motivo por el que algunos, en especial las mujeres, vuelven a fumar.
En cuanto a si el ejercicio ayuda a dejar de fumar, todavía no se avanzó demasiado. El equipo acaba de revisar 15 ensayos clínicos de Cochrane Collaboration, una ONG internacional que evalúa la literatura médica. Sólo uno de esos estudios había sugerido que mejora la tasa de cesación en un año. Pero el problema fue que la mayoría de esos estudios tenía limitaciones, como incluir un pequeño grupo de participantes. Por suerte, pronto aparecerán mejores pruebas.
El autor mencionó que "se están realizando estudios grandes y de buena calidad". La Asociación Estadounidense del Pulmón estima que los fumadores hacen entre cinco y seis intentos antes de abandonar el cigarrillo. Por eso, recomienda combinar los tratamientos y no usar sólo la terapia de reemplazo de nicotina o los fármacos, sino también la terapia conductual.
Fuente: Health Day