Es que las elevadas temperaturas se sienten en extremo en las alturas, allí donde los trabajadores –albañiles en su mayoría – pasan unas diez horas diarias y las condiciones en las que trabajan no son óptimas. Narciso Cantero, de Manos a la Obra, denunció a través del móvil de Radio 2: “Hemos recibido las quejas de los compañeros que deben soportar altísimas temperaturas sin agua potable, sin sanitarios y con ropa inadecuado lo que a esta altura es inadmisible”, sostuvo.
Según detalló Cantero, en algunas obras, sólo se les ofrece una manguera para refrescarse pero su extensión no supera el quinto piso por lo que, la mayor parte de los trabajadores que realizan sus tareas en altura, no se pueden hidratar. “No queremos lamentar ninguna tragedia”, alertó y se dirigió a los empresarios de la construcción: “Les pedimos que reflexionen y que devuelvan la dignidad al trabajador de la construcción”.