El alerta lanzado desde algunos supermercados sobre la falta de carne bovina en sus refrigeradores fue contrarestado por diversos sectores, entre ellos algunos frigoríficos y por supuesto, desde el gobierno. En diálogo con Radio 2, la Asociación de Productores de Carne Bovina Argentina (Aprocaboa) y el Mercado de Ganado Rosario coincidieron que la escasez de oferta tanto en el mercado de ganado de Liniers como en el de Rosario, no implica el desabastecimiento de carne a la venta.
“Estoy entrando en una reunión con Guillermo Moreno”, declaró Luis Somenzini del Mercado de Ganado Rosario a De tarde en tarde cuando fue consultado sobre el posible conflicto. De acuerdo a su versión, el secretario de Comercio, llamó a un encuentro con los productores en Buenos Aires. “Hace dos meses no pasaban las cosas que pasan hoy, algo ha perjudicado a los mercados en la formación de precios”, dijo Somenzini, pero luego se mostró enigmático y evitó explicarse.
Respuesta unánime: no debería faltar carne en los comercios del país
Productores de carne bovina, frigoríficos y el Mercado de Ganado Rosario rechazaron la supuesta escasez del bien de consumo, a pesar de la poca oferta en los mercados. El secretario de Comercio, Guillermo Moreno, se reúne con los productores
De acuerdo a su visión: “Hay escasez (de oferta de ganado) en Liniers y en Rosario pero esto no quiere decir que vaya a faltar carne, lo que pasa es que ha cambiado la comercialización de la hacienda, los mercados muy transparentes como Liniers o Rosario hay han sido sustituidos por la venta particular”.
En cuanto a la visita de Guillermo Moreno al Mercado de Liniers este viernes, expresó: “Entiendo la preocupación en que los precios se disparen pero hay otros métodos” y en referencia a quienes se veían beneficiados con la explosión de precios de la carne, manifestó: “El mercado y los consignatarios seguro que no, los productores van a vender la hacienda por oferta y demanda, no ponen precios”.
Por su parte, Ángel Girardi, de Aprocaboa, se mostró molesto por las medidas oficiales: “No se respeta el libre juego de la oferta y la demanda. Llevar el bife al plato lleva unos tres años y todas las medidas apresuradas matan a la vaca. El gobierno debe dar señales claras de apertura, solucionar los problemas de falta de agua en el Norte y la falta de tendidos eléctricos. Acá faltan los hombres que se fueron y las vacas que no están”.
“Estas medidas desalientan a la inversión”, continuó Girardi, “el que está generando esta política con un afán electoralista lo va a sufrir en carne propia en los años siguientes. Nosotros queremos que al presidente le vaya bien, pero no queremos estas apretadas sin reconocimiento del sector”, expresó en referencia a la presencia de Moreno en Liniers.
"El abastecimiento está asegurado"
Desde el frigorífico Mattievich también pusieron paños fríos a las denuncias de falta de carne en los mostradores de algunos supermercados porteños. Luego de que los productores anunciaran un inminente paro para protestar por las políticas anticampo del gobierno, algunos medios señalaron que varios supermercados porteños no tenían carne en sus mostradores. Sin embargo, al menos en Rosario, no hay señales de desabastecimiento.
"Me da la impresión de que el abastecimiento está asegurado", evaluó Jorge Torelli, gerente de operaciones del frigorífico Mattievich, quien explicó que "en el interior, incluido Rosario, el 70 por ciento (de la carne) pasa por carnicerías y el abastecimiento está normal". La situación de los supermercados, de todos modos, tampoco sería crítica. "Algunos tienen faena propia", explicó Torelli.
El ejecutivo señaló que sí existe otro problema. "Hay falta de oferta y esto impacta en los precios, que están más inestables. Pero se debera resolver, el gobierno está trabajando igual que todos nosotros", sostuvo.
Torelli esbozó un panorama de lo que sucede en Buenos Aires. "Si hay menos oferta en Liniers y se le suma el anuncio de paro por parte de los productores, esto genera un clima enrarecido", evaluó. "El desabastecimiento del que se habla es porque si no hay venta en Liniers (los supermercados porteños) deben comprar en forma directa a los productores y por ahí encuentran precios más duros. Pero hay que caminar hasta conseguir", señaló.