Los trozos de pollo recién comprados dispuestas sobre la tabla y el cuchillo a punto de ser hincado, cuando surge una duda, dos o más. ¿Cómo saber si lo que se acaba de comprar en el supermercado no está contaminado? El Instituto Panamericano de Alimentos señala que muchas veces los alimentos alterados, modifican algunas de sus características organolépticas, es decir, su color, consistencia y olor.
Respuestas a las dudas más frecuentes
Cuchillo en mano y a punto de cocinar, muchas inquietudes surgen en relación al estado de conservación de los alimentos, que en breve estarán en la mesa
La respuesta a la primera duda: “La carne de pollo debe tener la piel fina y adherida al músculo y no tener olor desagradable”. ¿Qué pasa si es carne roja o de pescado? La carne vacuna debe tener un color rojo intenso, la superficie firme y un olor característico, nunca debe presentar un color marrón verdoso o negruzco, superficie opaca y pegajosa, consistencia blanda y olor desagradable. El pescado debe tener escamas firmes, que no se desprendan con facilidad, ojos saltones y brillantes y no tener olor desagradable. Los moluscos, berberechos, mejillones, almejas y vieiras deben contar con valvas cerradas, no quebradas y abrirse con el calor.
Otras de las inquietudes nacen con el consumo de huevos: ¿Es peligroso comer huevos crudos? La respuesta es afirmativa, no tienen que tener la cáscara rota ni rugosa, la yema debe estar abultada en el centro y la clara bien transparente. Los huevos tienen que estar refrigerados, hay que comerlos ni bien se terminan de cocinar; no es conveniente guardarlos en la heladera. Y cuando tienen materia fecal en la cáscara, no refregarla porque los contaminantes ingresan al huevo.
La utilización de freezers también trae aparejadas algunos interrogantes, por ejemplo: ¿Se puede bajar el pollo del freezer y dejarlo a temperatura ambiente? De acuerdo a la fuente consultada, el pollo en estas condiciones no puede estar más de 2 horas fuera de la heladera. La noche anterior hay que ubicarlo en la parte inferior de heladera, o bien colocarlo en una bolsa debajo la canilla de agua caliente. Si lo descongelamos con microondas, debe funcionar bien la bandeja para que sea uniforme el descongelamiento.
Para encontrar más respuestas a las dudas que puedan asaltar a quien manipule alimentos, se puede consultar la Página Web www.panalimentos.org.ar del Instituto Panamericano de Alimentos.