Sufrió, pero vale, le sirve para seguir prendido en campeonato. River venció por 2-1 a Quilmes en el Monumental, en un partido en el que volvió a sufrir por sus errores defensivos. Higuaín abrió la cuenta para el equipo de Daniel Passarella, empató Chatruc para los cerveceros y finalmente le puso cifras finales al marcador Paulo Ferrari.

No, River no esperaba que Quilmes, último en el torneo, se le plantara de igual a igual en Núñez. Pero esa fue la apuesta del equipo de Mario Gómez para llevarse un buen resultado y estuvo cerca de lograr el objetivo.

El partido empezó trabado en la mitad de cancha e incluso hasta con algunas aproximaciones peligrosas de Quilmes.