Se lo nota nervioso a Rolando Schiavi por estos días, tanto adentro como afuera de la cancha. La realidad de Newell’s en el Clausura, tras ocho encuentros sin ganar, pone de mal humor a este defensor acostumbrado a luchar por metas importantes.

El fastidio del Flaco se puso de manifiesto cuando se le habló del objetivo por ahora incumplido de pelear arriba: “Nosotros nunca dijimos que queríamos ser protagonistas, la venimos luchando y se hicieron buenas campañas, pero siempre pensando en sacar muchos puntos para lograr objetivos que teníamos en su momento, que era salvarnos del descenso”.

“Un equipo que no realiza incorporaciones y al que se le fueron jugadores importantes, no puede salir a ser protagonista. Estamos para sumar puntos y tratar de mejorar la campaña del año pasado”, tiró Rolo.

Y para dejar en claro la meta propuesta para este semestre, el capitán de la Lepra habló de números: “El objetivo es terminar con 25 o 26 puntos”.

Después, para no caer en el pesimismo absoluto, Rolo puso un matiz de esperanza: “Así y todo estamos en un lote de equipos de mitad de tabla y si el sábado llegamos a ganar, otra vez vamos a estar de mitad de tabla para arriba”.

“No se le puede echar la culpa a un jugador”

El principal referente del plantel rojinegro se refirió al presente futbolístico del equipo: “No se están dando los resultados que queremos, en los dos últimos partidos jugamos muy bien pero los dos fueron empates y la realidad marca que Newell’s no está en una buena posición”.

“No estamos embocando el arco, nada más. Además, nos llegan pocas veces y nos convierten goles. Trataremos de cambiar eso”, explicó el defensor de 36 años. “Vos vez otros equipos que, con mucho menos que nosotros, convierten y ganan, y a nosotros nos cuesta muchísimo. Nos ha pasado a lo largo de todo el torneo”, agregó.

“Se siente mucha impotencia y bronca, porque todos tenemos chances de convertir y no podemos hacerlo, acá no se le puede echar la culpa a un jugador o dos. Eso genera nerviosismo en el equipo y también en la gente”, concluyó Schiavi.