Al levantar el teléfono, alguien del otro lado de la línea asegura ser del servicio técnico de la empresa de telefonía. Con alguna excusa simple, como comprobar que ande bien la línea, piden a quien atiende que marque 90 y luego la tecla numeral (#). Según denuncia un email que circula desde hace tiempo en las casillas de los rosarinos, esta maniobra habilita que la línea en cuestión sea utilizada para desviar llamados que se sumarán luego a la cuenta telefónica del usuario estafado.

¿Es verdad, de modo tan simple pueden robar la línea teléfonca? No, es otro mito urbano que se cae según planteó, en diálogo con Luis Novaresio (Radio 2), el gerente de Relaciones Públicas de Telecom Ricardo Scaglione. "En Argentino no puede suceder", resumió.

"Siempre se rescata la historia por email, pero esto pasó hace diez años en los Estados Unidos, con un sistema particular de centrales que usaban las empresas únicamente. Allí se discaba el numero 90 y podían quedarse con la línea, pero ni bien pasaron 48 horas la empresa modificó sus centrales", relató.

Y aclaró: "En la Argentina no puede suceder porque centrales son distintas". Además, "por supuesto ya todo el mundo sabe qué generó semejante problema". El caso "es antiguo", pero "siempre se rescata en algún informe de Internet", aseguró.