Este martes, Sergio Massa mantiene un encuentro con Miguel Lifschitz en torno a una agenda en común. Antes de esta reunión, se refirió a su postura en relación a la gestión de Mauricio Macri. Aunque celebró algunas cuestiones, como por ejemplo, la vocación de diálogo del gobierno cuestionó la modificación de Ganancias. Negó ser un “opositor” ya que, según señaló, construye en favor a los intereses argentinos.
En diálogo con Radiópolis, el programa de Roberto Caferra en Radio 2, el líder del Frente Renovador, confirmó la existencia de una reunión, este martes, con el gobernador santafesino a la que también concurrirán otros dirigentes del espacio, entre los que se contarán al diputado nacional Alejandro Grandinetti y el referente del equipo económico, Aldo Pignanelli. “Vengo a ponerme al servicio de los santafesinos, a plantear una agenda en común de trabajo”, señaló y remarcó: “Si a Lifschitz le va bien le va bien a todos los santafesinos”.
“Vamos a impulsar juzgados y fiscalías especializados en narcotráfico, medidas para la metalmecánica, entre otros temas. Esto es lo que nos lleva a la provincia, no sólo cuando hay elecciones como hacen algunos políticos, el vínculo con la gente se consolida cuando trabajamos juntos”, sostuvo.
Consultado sobre su mirada en relación a la gestión de Mauricio Macri, manifestó: “El 1 de marzo, estará la asamblea legislativa, el presidente aprovechará para contarnos el estado de la Nación, el camino y haremos un balance, ahora sólo podemos analizar medidas”, advirtió.
Una de las iniciativas, es la modificación en Ganacias. Al respecto, objetó: “Tiene sabor a muy poquito”. Y adelantó: “Vamos a impulsar una escala, no puede ser que no se descuente el alquiler del impuesto, tiene que haber fuentes de financiación, impuestos a los altos ingresos. Es el momento de ayudar a la gente en su poder de compra”.
A pesar de las críticas a la medida, Massa mostró una mirada positiva sobre el nuevo gobierno: “No hay que subestimar a nadie, me parece que Argentina inauguró una nueva etapa que requiere dirigentes modernos, democráticos, con capacidad de diálogo”, observó. Sobre este último punto, remarcó: “Anoche tuvimos la posibilidad de discutir con ministros en función que las provincias recuperen lo que perdieron. Santa Fe lo hizo a través de la Corte”, dijo sobre la coparticipación.
“Vemos la vocación de escuchar y si no existe lo diremos también”, aclaró. Y ahondó en ese sentido: “El trato respetuoso que tiene conmigo el presidente no me inhibe, si acierta aplaudiré y si se equivoca levantaré la voz con fiereza”, expresó.
A continuación, la periodista Almudena Munera le preguntó si se consideraba un “opositor que no molesta”. Su respuesta fue muy firme: “Yo no destruyo, construyo. La Argentina necesita que salgamos de esta enfermedad amigo–enemigo, que hay que arremangarse para ayudar a la gente”.
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