Umberto Eco, que recibió en Madrid la Medalla de Oro del Círculo de Bellas Artes, señalo que en la Biblioteca Nacional, en la capital española, vio libros de quinientos y mil años; "sin embargo, no sabemos cuánto puede durar un disquete de ordenador. Yo no podría leer a Proust en digital, sería imposible", aseveró.

"La amenaza de la libertad de prensa –argumenta– ya no tiene que ver con dictadores o con censuras, sabemos que está la Rusia de (Vladimir) Putin o Corea del Norte, pero eso no pasa en la mayoría de los países. Para hacer un periódico hacen falta 40 páginas de publicidad y el periódico está obligado a conseguir muchas noticias para sobrevivir, y no están dispuestos a librar la batalla. Hoy hay una censura por exceso de información".

El autor de El péndulo de Foucault también se muestra pesimista con el futuro de la televisión pública. "En Italia no existe, porque está bajo el control de Berlusconi; por tanto, se ha convertido en privada. El asunto más interesante se ha producido en Estados Unidos, donde toda la televisión es privada menos un canal, el 13, que tiene programación cultural y se considera pública. A ver qué pasa –añade–; la televisión pública puede quedar bajo el control político de la derecha o la izquierda".

El escritor también piensa que los intelectuales "no tienen virtudes proféticas, que la figura del intelectual es un mito de la izquierda". No obstante, cree que "el intelectual tiene que influir más a largo plazo, no de forma inmediata".

Fuente: EFE