No sólo en el Concejo Municipal la oposición fue a la carga con el tema inseguridad. Como lo había hecho el concejal Jorge Boasso para la ciudad, los diputados provinciales justicialistas Alberto Monti y Victoria Ramíez presentaron un proyecto de ley para que se declare en emergencia al departamento Rosario por la ola delictiva. Está claro que la cuestión de la seguridad será uno de los ejes de campaña, de cara a las elecciones de concejales que se realizarán en toda la provincia el 27 de septiembre próximo. 

La declaración permitiría al Poder Ejecutivo habilitar partidas extraordinarias para personal y móviles policiales, ante una situación que consideran imperioso afrontar: desde el "10 de diciembre de 2007 los índices de inseguridad en la Ciudad de Rosario y el Gran Rosario ha crecido a niveles alarmantes".

La iniciativa sostiene que "en su oportunidad el diario Clarín señaló que el 49 por ciento de la gente la ciudad de Rosario alguna vez sufrió el delito en carne propia, según un relevamiento realizado en junio por el Observatorio de Opinión Pública de la Universidad Argentina de la Empresa (Uade)”.

Para los legisladores que escribieron el proyecto en Rosario “la falta de seguridad es percibida como en los distritos de mayor violencia e inseguridad, como Capital Federal y el conurbano bonaerense”. En esos lugares, afirman, entre el 51 y el 57 por ciento de la población dice haber sufrido algún delito.

En los fundamentos se mencionan varios hechos de inseguridad ocurridos en los últimos tiempos y entre ellos se incluye el partido por eliminatorias jugado el 5 de septiembre en el Gigante de Arroyito.

"El reciente partido de futbol de Argentina-Brasil fue retratado como otro nuevo episodio de falta de seguridad en el cual se falsificaron entradas, ingresó violentamente la barra brava de Rosario Central, al igual que en el partido del martes 8 de septiembre, disputado entre River Plate y Rosario Central donde al finalizar el encuentro hubo enfrentamientos violentos con la policía”, dice el texto.