El número uno del golf mundial, el estadounidense Tiger Woods, resultó herido en un accidente con su auto que se registró muy cerca de su casa, en la localidad de Isleworth, en Florida. En principio se habló de "graves consecuencias" aunque por la tarde se conoció que el astro fue dado ya de alta del hospital y se encuentra en "buenas condiciones".

Según un reporte citado por el periódico The Independent y basado en declaraciones del alcalde de la citada localidad, Gary Bruhn, el deportista dejó el Hospital Central de la Salud de Occoe, luego de haber sido tratado "por heridas en la cara, pero ya se le dio el alta".

En principio, fuentes periodísticas locales habían informado que el golfista, de 33 años, estaba en "grave estado", después del episodio que se produjo esta madrugada cuando el Cadillac Escalade que manejaba perdió el control, tras chocar con una boca de incendio y estrellarse con un árbol.

De acuerdo a las investigaciones de los peritos, los airbags del vehículo no funcionaron, presumiblemente, porque el impacto no fue tan fuerte, pues se estima que el astro del golf conducía a menos de 50 kilómetros por hora, según informó el periódico El Centinela, de la ciudad de Orlando.

Mark Steinberg, agente del deportista, sostuvo a la cadena televisiva CNBC que Woods "se encuentra bien" y que las heridas eran principalmente "lastimaduras en la cara".