Muchas empresas modernas van comprendiendo que el trabajo final es más importante que la forma, el horario o el lugar en el que se desarrolle, y por eso han decidido flexibilizar sus políticas y sus normas para permitir que los empleados trabajen desde sus casas, incluso desde otras ciudades y países.
Un estudio interno realizado entre casi dos mil empleados por Cisco acaba de dar a conocer cifras interesantes sobre el impacto social, económico y ambiental que tiene el telecommuting o trabajo desde casa y el aumento de la flexibilidad del trabajo, la productividad y la satisfacción general como resultados de esta posibilidad.
La idea de que los empleados trabajen desde casa es un poco difícil de digerir para algunos directivos, ya que se trata de romper con un paradigma y de dejar de tenerlos en frente para poder controlar cada una de sus acciones.
Pero la experiencia de quienes lo han intentado demuestra que trabajar desde casa no significa trabajar menos (los empleados de Cisco invierten 60% del tiempo que ahorran mediante este sistema en trabajar y 40% en asuntos personales), sino, por el contrario, permitir que los empleados tengan una mejor calidad de vida, más tiempo libre, y que puedan desarrollar sus tareas en momentos que se sientan con la mayor disposición, lo que desembocará en aportar su máxima productividad.
Además, 69% de los entrevistados manifestó un aumento en su productividad al trabajar desde casa, 75% dijo que sus tiempos de ejecución de trabajos mejoraron, 80% expresó que su calidad de vida aumentó, 91% afirmó que el poder trabajar desde casa era muy importante para su satisfacción general, 83% manifestó que su habilidad para comunicarse y colaborar con otras personas de la compañía era igual o mejor que cuando se encontraban en el sitio de trabajo, entre otros.
En palabras de Rami Mazid, vicepresidente de Servicios de Clientes Globales y de Operaciones de Cisco, “En la era del mercado global el tiempo y la distancia separan las personas y los espacios de trabajo. Cisco ha reconocido desde tiempo atrás que el trabajo desde casa y las tecnologías colaborativas son efectivos en derrumbar las barreras divisorias y en posibilitar la transición hacia una empresa sin fronteras. Además, como lo demuestra nuestro reciente estudio, la correcta ejecución un programa de trabajo desde casa puede ser extremadamente efectivo para desatar el potencial de los empleados al aumentar el balance entre la vida y el trabajo, la productividad y la satisfacción general”.
En un mundo globalizado y con un aumento creciente en la creación de empresas multinacionales, y contando con las enormes ventajas y posibilidades que ofrece la tecnología actualmente, se evidencia la necesidad de desarrollar estrategias que permitan a los empleados de una compañía trabajar desde diferentes países y en distintos horarios para cumplir así con los objetivos de productividad sin descuidar su vida personal y para sentirse contentos en su lugar de trabajo y motivados a explotar su máximo potencial.
Fuente: Tendencias 21