“En la ruta 11, donde murieron nuestros hijos (en el norte provincial) que viene de Resistencia, donde hay camiones que llegan de Brasil, circulan vehículos sin tener las condiciones mínimas en la parte mecánico, no hay controles de alcoholemia”, afirmó Kohen.
El padre recordó que el camionero que mató a sus hijo no tenía licencia e instó a controlar las horas que trabajan los condutores, que “muchas veces están en alguna industria de Rafaela cargando mercadería, luego cenan, toman alcohol, y a las 8 de la mañana tienen que estar en Buenos Aires·.
Kohen dijo que el grupo Tragedia de Santa Fe busca crear conciencia de que esta es una de las principales causas de muerte en la Argentina, que “no discrimina raza, religión, y va a seguir si no se hace algo en forma inmediata”.
En ese sentido, insistió en que el control de alcoholemia y limitar las horas de trabajo de los choferes son fundamentales.