Ante esto, la viuda de Forza, Solange Bellone, quiere irse del país porque, reveló su abogado, Miguel Angel Pierri, "está aterrada, tiene pánico por todo lo que pasó".
De todas formas, el letrado aclaró que Bellone "estará ubicable fácilmente para la Justicia porque dejará constancia de sus pasos y sus domicilios".
El triple crimen es investigado por la fiscal de Capital Federal Ana María Yacobucci, mientras que el accionar de los narcos mexicanos sobre el tráfico de efedrina está cargo de Federico Faggionatto Márquez, juez federal de Zárate Campana, quien dijo que las investigaciones por el asesinato de los empresarios "están avanzadas", aunque aclaró que aún es prematuro relacionar ambos casos.
De todas formas, cuando faltan sólo tres días para que se levante el secreto de sumario, Yacobucci deberá definir si acepta o no el pedido de los familiares de los tres empresarios asesinados, que reclaman que se unifique la causa del tráfico de efedrina con la del triple crimen.
Mientras tanto, hoy la fiscal verá desfilar por su despacho a los titulares de una droguería de la Ciudad, quienes le vendieron a Forza una farmacia que poseía en Viamonte al 1400, donde recibió una de las tantas amenazas, publicó el diario Clarín.
En tanto, uno de los investigadores del caso aseguró que "sólo personas entrenadas en una fuerza de seguridad pueden realizar un procedimiento de magnitud como es el de levantar a tres hombres jóvenes, mantenerlos en cautiverio, asesinarlos y luego disponer de sus vehículos, transitar con ellos por varias jurisdicciones, sin ser interceptados mientras ejecutan la faena".
Según dijo, "los asesinos son argentinos o paraguayos, pero lo más probable es que sean mano de obra local. Gente que conoce el territorio y que puede organizar un operativo en el que habrán participado entre 8 y 14 personas".
En este sentido, agregó que "los homicidas pueden ser policías en actividad, ex oficiales o delincuentes profesionales", con vínculos con la policía.
Por su parte, María Idalia Gómez, una periodista mexicana especializada en temas de narcotráfico, dijo que "la ejecución de los tres argentinos tiene el sello del narcotráfico mexicano, pero sospecho que los asesinatos fueron ejecutados por mano de obra local".
"No me sorprende que el cártel de Sinaloa se haya instalado en la Argentina, es más, me animaría a decir que también operarían otros cárteles mexicanos", enfatizó.