A mediados de los 80, en Cañada de Gómez (Santa Fe), Coki Debernardi, Carlos Verdicchio, Juan Albertengo, Rubén Carrera y Tato Fernández formaron Punto G. Una banda de rock que logró instalarse en la escena rosarina del momento como una de las más importantes de la época. Diego Giordano analiza con su nuevo libro, la incorporación y el impacto que generó esta banda en un territorio donde reinaba el pop post-Trova.
La escena rosarina del rock a comienzos de los 80 y la irrupción de Punto G. “La Trova Rosarina fue un fenómeno ajeno al rock. Era un movimiento muy ligado a la música popular al folclore, pero también ligado al rock. Los hermanos menores de la Trova son los que fundan bandas como Identi-Kit y Graffiti que son los grupos Pop emblemáticos de los 80. Todo lo que vino después de la Trova fue anti-Trova en el sentido que eran grupos influenciados por bandas inglesas como Duran Duran y en el plano nacional Soda Stereo. Esta música era muy bailable y muy pop”, analizó Giordano en contacto con Rosario3.
“La aparición de Punto G fue muy importante porque nadie esperaba la aparición de una banda con esas características muy vincula a un rock más salvaje. Ellos tocaban en cuero mientras los otros se maquillaban y peinaban con los pelos hasta el techo. Lo que trajo Punto G fue un shock muy fuerte para la escena local", aseguró.
Giordano también recordó que "Ricardo Vilaseca, por aquel momento tecladista de Identi-Kit, dice en el libro: cuando apareció Punto G y los vi en vivo, me di cuenta de que nos habían convertido en el pasado”, afirmó Giordano.
“Lo que trajo Punto G, y que en su momento fue tan impactante, fue su impronta muy indómita y salvaje sobre todo en el escenario. Ellos tallaron una estética de la crudeza que en esa época no estaba muy en boga”
Reconstruir la historia de la banda a partir de los testimonios de personas que fueron testigos presenciales de la época. “Hice más de 40 entrevistas para este libro y toda la información que había en esos testimonios era muy valiosa. No le encontraba la vuelta a la obra de cómo escribir el libro hasta que un amigo me dijo: por qué no te tiras para el lado de un libro coral, que es un libro básicamente de entrevistas. Y lo que hice fue escribir una introducción en donde yo cuento la historia de Punto G y después vienen las entrevistas editadas”, detalló Giordano.
La letra de una canción de la banda sirvió como disparador para titular este material. “Es parte de la letra de una canción de Punto G y me parecía que englobaba lo que se hablaba en el libro. Este libro habla del final de una época en el rock argentino y habla también del final de una época de la política argentina porque termina con la crisis e hiperinflación del 89”, concluyó Diego Giordano.