El famoso artista plástico Milo Lockett pasó por Rosario esta semana y pintó entre el miércoles y el jueves los primeros murales de un futuro trabajo que formarán parte del paisaje de la ciudad. Un edificio enteramente intervenido por el artista chaqueño de reconocimiento internacional.
En contacto con El Tres, Lockett se mostró entusiasmado con el proyecto y con la posibilidad de hacer “un aporte para embellecer la ciudad, ser parte de esta ciudad que es increíble”, a la que está unido, además, por familia; su esposa es rosarina.
Las figuras de Milo, que hace 20 años enamoraron a Francis Ford Coppola, siempre contenidas por el filete negro, anticipan ahora en Salta al 2000 los colores que se verán en la medianera del edificio que comenzará a construirse el año que viene.
“Me pareció innovador”, consideró y festejó el espacio para el arte que, a su entender, atraviesa actualmente “un momento bisagra” y está más efervescente que nunca.
“Cada vez que hay crisis el arte emerge, la gente se compromete con el sentimiento ante la imposibilidad de lo económico –planteó–. Hay un cambio de época a nivel mundial que no somos ajenos. Con la llegada de la Inteligencia Artificial hay un cambio de paradigma, ahí el arte tampoco es ajeno, hay muchas propuestas, son distintas. Eso tiene el arte que siendo tan ecléctico se ve reflejado en cada país una tendencia pero al mismo tiempo todo convive y es contemporáneo”.