El actor británico Tom Holland, que a sus 29 años atraviesa un momento de plena expansión profesional, destacó que el guión de la adaptación de “La Odisea” dirigida por Christopher Nolan es el mejor que leyó en su vida. La película se perfila como una de las más esperadas de Hollywood para mediados de 2026, cuando está previsto su estreno.
En La Odisea, Holland interpreta a Telémaco, hijo del legendario Odiseo. “Es el mejor guión que he leído en mi vida”, declaró en una entrevista con la agencia AFP sobre el proyecto cuyo rodaje lo llevó por distintas locaciones del Mediterráneo.
La película marca el regreso de Nolan tras el éxito mundial de Oppenheimer y reúne un elenco de primera línea conformado por Matt Damon, Anne Hathaway, Robert Pattinson, Charlize Theron y Zendaya, pareja y prometida de Holland.
“Chris (Nolan) es un verdadero colaborador. Sabe lo que quiere, pero también abre espacio para que uno aporte y construya el personaje”, explicó el actor.
Además de compartir su nacionalidad, ambos tienen en común el haber sido figuras clave en diferentes películas de superhéroes: Nolan marcó un hito cinematográfico para el género con la trilogía de Batman: el caballero de la noche, mientras que Holland es protagonista de las más recientes películas de Spider-Man.
De hecho, poco antes de hablar con la prensa, el actor fue visto filmando Spider-Man: Brand New Day en Glasgow, con la ciudad escocesa transformada en Nueva York. Dicha película llegará a finales de julio del próximo año, apenas dos semanas después del estreno de La Odisea.
“Todavía se siente como la primera vez”, reconoció Holland sobre su séptima participación en el universo Marvel, y sumó: “Ayer estaba conduciendo un tanque en la calle principal de Glasgow frente a miles de fans, y fue increíble. Se sintió nuevo, emocionante y estimulante”.
El compromiso de Holland con Zendaya, confirmado tras su aparición con un anillo en los Globos de Oro, se convirtió en noticia mundial.
Por otro lado, reconoció que con la fama se volvió “un poco más introvertido” y que a veces anhela mayor privacidad. Sin embargo, se esfuerza por mantener intacta su esencia: “Ese niño dentro de mí siempre estará ahí. Es importante no perder nunca el entusiasmo por jugar”.