La última semana, la Biblioteca Argentina Dr. Juan Álvarez y las Facultades de Humanidades y Artes, y de Ciencias Médicas, de la Universidad Nacional de Rosario, firmaron un acuerdo de cooperación con el fin de resaltar las colecciones de libros de alto valor patrimonial que integran el acervo editorial de la ciudad y la región, en especial, los que pertenecen al período renacentista.
En la presentación del proyecto llamado Un Renacimiento rosarino, participaron autoridades municipales y representantes de las mencionadas casas de Altos Estudios. Allí se hizo hincapié en el valor histórico de un puñado de ejemplares alojados en bibliotecas de la ciudad.
El proyecto busca la catalogación precisa de las obras, la divulgación de su valor, la producción de un libro y la realización de un documental, mediante la colaboración interdisciplinaria entre filólogos, historiadores, conservadores, bibliotecarios y realizadores audiovisuales, según se detalló
En diálogo con El Tres, el profesor e investigador Roberto Casazza, uno de los máximos referentes latinoamericanos en bibliografías de los siglos XV al XVIII, afirmó: “Si las obras no se investigan, no viven”.
Casazza, también docente del Centro Studium, detalló que existen ejemplares de gran valor que pertenecen a un período comprendido entre los siglos XVI y XVII en las bibliotecas Argentina, de Humanidades y de Ciencias Médicas, como así también en el convento de San Lorenzo.
Para el especialista en manuscritos medievales, bibliografía colonial, libros antiguos y raros, “hay muy diversos estratos en los cuales estas obras son valiosas, tanto en lo que refiere a la historia de la Cultura clásica como así también a la historia de la Ciencia".
Casazza explicó que en los trabajos de revalorización de publicaciones históricas, se han hallado anotaciones y esta también es una razón que impulsa su estudio. “Encontramos, dentro de los libros, manuscritos con anotaciones de pensadores relevantes. Eso nos da un panorama muy completo de la Cultura. En este caso, los siglos XVI, XVII y XVII”, advirtió.
Y continuó: “Otro aspecto importante del proyecto es el relacionado con la historia de la ciudad y Rosario como proyecto cultural”.
Un Renacimiento rosarino permitirá no solo poner en valor los ejemplares en estudio, que conformarían un conjunto de entre 30 y 40 piezas, sino también facilitar su acceso a quienes tengan interés en consultarlos.